Día lluvioso.
Y uno de los pocos en que nos podemos reunir los tres (y con nuestro gato Atila, por supuesto) y pasar una tarde relajada en casa.
Así que, era una buena ocasión para preparar un postre y merienda ya de paso..
Como tenía que ser en un plis plas... pues acabó en un bizcocho aromatizado a la vainilla, con almendra triturada.
Y la cobertura de chocolate negro y crema catalana, con almendras enteras y cubierto todo con el azúcar caramelizado.
Si gustais..
Y... otro día, más.
No hay comentarios :
Publicar un comentario